Vogt, se vió obligado a emigrar a Suiza por sus ideas liberales, y luego de una serie de acontecimientos analizados por Marx, se convierte en espía y agente provocador de Napoleón III. En este libro, Marx no solo polemiza con Vogt y desenmascara sus actividades, sino que estudia un periódo de la historia de Europa: el de la formación de las nacionalidades y las consiguientes luchas políticas.