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Boletín Nº 11 (Febrero 2009)

El factor internacional

El factor internacional

Carta a Smirnov[1], traducida por Rosanna Cortez especialmente para este boletín de León Trotsky, “Le facteur international”, Oeuvres, Institut Léon Trotsky, Francia, 1988, tomo I, 2.º serie (enero 1928-julio 1928), p. 84-88. La versión francesa fue traducida del ruso, 1109, con el permiso de la Houghton Library. Las notas fueron preparadas para esta edición, salvo las que tengan aclaración en contrario.

Estimado Ivan Nikitich:

He recibido su carta y le he enviado un telegrama. Su carta es la primera que recibí aquí. Es porque el servicio de correo le presta más atención al ex comisario de correos y telégrafos[2] o por alguna otra razón, no lo sé. Al llegar aquí, yo he escrito una carta dirigida a Zangezury. También escribí a los otros exiliados de los que tengo la dirección, pero no tuve ninguna respuesta. El correo normalmente es lento aquí y en este momento las tormentas de nieve de febrero agravan el problema. Tuve respuestas telegráficas de Rakovsky[3], Kasparova[4], Sosnovsky[5] y Muralov[6]. Todos están instalados, tienen buena moral y trabajan, Sosnovsky y Muralov, en oficinas locales del plan, Rakovsky no lo sé… No recibí respuesta a mi telegrama a Serebriakov[7] en Semipalatinsk ¿No lo habrán enviado a otra parte? No recibí respuesta de Radek: “no es la dirección indicada”. Aparentemente Radek no ha ido a la oficina de telégrafos local o quizás se la envié a otro lado.

Su invitación a visitar Novo-Bayazet es muy tentadora, pero su realización implicaría algunas dificultades. El viaje ha sido muy cansador y, para colmo, nuestros compañeros de viaje han perdido dos valijas, una de ellas contenía los libros más preciados y más necesarios… La apariencia técnica de mi carta podría hacerle pensar que tengo un secretario, pero no es para nada así. Es verdad que tengo una máquina, pero es necesario organizar el trabajo con ella sobre una base nueva.

En este lugar se caza y se pesca, por lo que también puedo devolverle su amable invitación. Aunque vivimos aquí desde hace tres semanas, todavía no he ido a cazar. Las causas son muchas, pero la principal ha sido la fiebre alta que tuve y que no me ha dejado durante todo el viaje hasta acá. Natalia Ivanovna y Liova[8] han reclamado porque todavía no nos han dado alojamiento. Vivimos en un hotel que se remonta a la época de Gogol.

Por supuesto, usted ha leído la carta a la redacción de los dos mosqueteros[9]. Sería difícil imaginar un documento más miserable y desprovisto de valor. Se ha confirmado ahora que el grupo Contre le Courant es el que está más alejado de todos del bolchevismo. ¿Qué bolchevismo? ¿El que nuestros dos infelices mosqueteros pregonaban hasta ayer? ¿O el que atacan? Ni una palabra de esto y nada sorprendente. Este documento adulador, falso, servil y obsceno se basa íntegramente en que evita los problemas más fundamentales en el centro de la cuestión.

La situación internacional y el movimiento revolucionario internacional son muy prometedores, lo que es nuevo e importante para el futuro próximo. La Pravda tiene razón en escribir: “El período de una cierta apatía y desmoralización que ha comenzado después de la derrota de 1923[10] y que permitió fortalecer la posición del capitalismo alemán está en tren de desaparecer” (Pravda, 28 de enero de 1928). Ahora se repite a cada momento este tipo de declaraciones sobre la apatía y la desmoralización desde 1923. Sin embargo, en esa época, los que no comprendían la significación y la importancia de la derrota de 1923 ¡acusaban de liquidacionistas a los que predecían el carácter inevitable de tal período! Sin comprender el carácter internacional de este período, no se puede entender correctamente nuestros asuntos internos. La derrota de 1923 tuvo un efecto menor en Inglaterra que en el continente y un nuevo ascenso comenzó allí en 1926[11], pero fue quebrado por la derrota de este movimiento. Los efectos más profundos de la derrota de 1923 se sintieron en Alemania, por supuesto, y si se quiere, también entre nosotros. La Pravda tiene razón en decir que la apatía y la desmoralización empiezan a desaparecer en Alemania.

Desgraciadamente, no tengo aquí la prensa alemana, ni la prensa extranjera en general. Y sin embargo, sería necesario seguirlas más de cerca que nunca, porque todo el curso de los acontecimientos lleva al primer plano cada vez más a las cuestiones internacionales.

Es bueno volver sobre las viejas controversias a la luz de los nuevos acontecimientos. Nuestra evaluación de la situación europea después de la derrota de 1923 estaba ligada a la cuestión del rol de Norteamérica en Europa. Ahora, nuestra idea ya adquirió la fuerza de un prejuicio –a saber, que considerar el destino de Europa sin examinar el rol de Estados Unidos es como tratar de llevar la contabilidad sin tener la lista de las transacciones del propietario. Lo que se llama la “normalización” de Europa se ha realizado con la ayuda de Norteamérica. Es sobre esta base que la socialdemocracia ha resucitado con su nueva religión (que hoy está en tren de desaparecer) del pacifismo democrático americano[12]. La vanguardia proletaria de Europa estaría más fuerte hoy precisamente si hubiera previsto este período de apatía y desmoralización, el americanismo y el pacifismo, etc., si no le hubieran insinuado la idea que tal predicción era “liquidacionismo”. Este fue el error fundamental del V Congreso[13]. Los errores de la dirección Maslow-Ruth [Fischer][14] ya tenían un carácter de desviación. Se pensaba que los peldaños de la escalera estaban arriba y no abajo y así, levantaban el pie en lugar de bajar. En este tipo de situación, uno no puede no romperse la nariz. El período descendiente y el fortalecimiento de la socialdemocracia en la clase obrera alemana han durado cuatro años, según Pravda. Sólo ahora “comienza a desaparecer”. Pero nunca hemos previsto un período tan largo. La verdad es que este período se ha prolongado a causa de una evaluación incorrecta de nuestra época en general y de la orientación estratégica incorrecta que de ella se deriva.

En este momento, Norteamérica es mucho más dueña de Europa que lo que era hace cuatro años, cuando destacamos por primera vez esta cuestión en términos teóricos. Sin embargo se ha elaborado mucho vapor en la caldera norteamericana. Por supuesto, la potencia financiera de Estados Unidos y de sus monopolios hace posible la “planificación” y la “regulación” en una medida sin precedente (para el capitalismo). Esto permite atenuar ciertas crisis, posponerlas mientras crecen las contradicciones internas. Aparentemente la situación en Estados Unidos ha alcanzado ahora el punto de una crisis comercial e industrial general, una crisis de toda la economía. Hasta qué punto ésta será profunda, severa y durable, será difícil predecirlo. Pero no es difícil predecir que Norteamérica rectificará las cosas para sí misma a expensas de Europa, y que esto significa, ante todo, a expensas de Inglaterra. Ya el antagonismo angloamericano ha emergido en forma apenas enmascarada de la “cooperación” angloamericana. En el próximo período, este antagonismo será el eje de la política mundial. Y, para Europa, esto significa todo, salvo “el pacifismo democrático”. Ahora todo el problema es evaluar correctamente el proceso en su conjunto y cada fase sucesiva en particular. En los años que vienen, el factor internacional dominará todo.
En India, parece que se preparan acontecimientos significativos. Sin embargo, debo confesar que sé muy poco de la India, mucho menos que lo que sé sobre China, que es el tema principal sobre el que trabajo ahora. Desgraciadamente, mis libros sobre India están en una de las valijas perdidas. En este momento, trato de obtener un nuevo envío de libros de Moscú. Lamentablemente, esto significa no pocas dificultades, sobre todo en términos de pérdida de tiempo.

Si entendí bien, su correo me llega por Bakú y Krasnovodsk. Si esto es así, ellos podrían darse cuenta que estamos más cerca de lo que estábamos en Moscú. Pero todo esto queda por ser experimentado de manera empírica.


1] Ivan N. Smirnov (1881-1936) bolchevique de la Vieja Guardia, cumplió un papel muy destacado en la Guerra Civil. Como militante de la Oposición de Izquierda, fue expulsado del partido en 1927 y capituló en 1929. Rehabilitado, fue nombrado director de las fábricas de automotores. Fue arrestado a prin­cipio de 1933 y permaneció en cárcel hasta que el primer Juicio de Moscú lo sentenció a muerte.

[2] Cuando fue excluido del partido en diciembre de 1927, Smirnov todavía era comisario del pueblo en el correo y el telégrafo. Según Victor Serge, su primer acto había sido irse a inscribir como desocupado. (Nota de la versión francesa).

[3] Christian Rakovsky (1873-1941): influyente revolucionario en los Balcanes antes de la Primera Guerra Mundial. En 1916 participó de la Conferencia de Zimmerwald y en 1917 ingresó al Partido Bolchevique Ruso. De 1919 a 1923 presidió el Consejo de Comisarios del Pueblo de la República Socialista de Ucrania. Miembro del CC de 1919 a 1925. Ataca la política de “rusificación” de Stalin siendo uno de los pocos oradores que se atreve a criticarlo en el XIII Congreso. Fue apartado de Rusia por un nombramiento de Embajador en París entre 1925 y 1927. Se une a la Oposición Unificada. En el XV Congreso se pone al lado de los irreconciliables agrupados en torno a Trotsky, siendo expulsado del partido en 1927. Fue uno de los dirigentes de la Oposición de Izquierda. Estuvo exiliado en Kazajstán, sufriendo condiciones climáticas terribles. Capituló en 1934, siendo poco después detenido y condenado a la cárcel por el tercer Juicio de Moscú.

[4] Varsenica o Verónica Kasparova (1875-1941), de origen tártaro, se unió al partido en 1904. En el curso de la guerra civil, ocupó puestos importantes en la jerarquía de comisarios políticos del Ejército Rojo, cercana colaboradora de Trotsky. Luego fue responsable de la sección Oriente del secretariado femenino internacional, de la sección de mujeres del PC, profesora de la Universidad de los Pueblos de Oriente. Se unió a la Oposición de Izquierda y fue deportada junto con su hijo. (Nota de la versión francesa). Fue fusilada al mismo tiempo que Rakovsky.
[5] Lev Sosnovsky (1886-1937), militante desde 1904, periodista popular de un gran talento, era la mejor pluma de la Oposición, todo el tiempo odiado por los burócratas, apresado desde el primer momento de su deportación. (Nota de la versión francesa).

[6] Nikolai Muralov (1877-1937): bolchevique desde 1903, participó en la revolución de 1905. Fue uno de los dirigentes del Soviet de Moscú después de febrero de 1917. Jefe de los Guardias Rojos que ocuparon el Kremlin en octubre. Fue miembro del Estado Mayor de Trotsky durante la Guerra Civil. Participó en la Oposición de 1923 y en la Oposición Unificada. Expulsado y deportado en 1927. Fue puesto en libertad y se negó a firmar una declaración contra Trotsky. Luego se retiró de la actividad política. Fue condenado a muerte y fusilado en el segundo Juicio de Moscú.

[7] El silencio de Serebriakov se explicaba quizás por su desmoralización. (Nota de la versión francesa). Leonid Serebriakov (1870-1937) ocupó puestos importantes en la in­dustria durante los años veinte. Durante un breve periodo militó en la Oposición de Izquierda, fue expulsado (1927), se retractó (1929) y pudo reingresar al partido (1930), pero fue fusilado después del segundo proceso de Moscú.

[8] Natalia Ivanovna Sedova (1882-1962) fue la segunda compañera de Trotsky, que había conocido en París durante su primer exilio, luego de su evasión. Lev L, generalmente apodado León o Liova Sedov (1906-1938) era su hijo mayor, nacido cuando Trotsky estaba en prisión. (Nota de la versión francesa)

[9] Los “dos mosqueteros” son Zinoviev y Kamenev. La carta era el documento que habían dirigido a la Pravda para liberarse de toda responsabilidad después de la publicación de las cartas a Pereverzev, el 15 de enero. Destacaban su ruptura con Trotsky a causa de su determinación a operar “una sumisión entera y real a las decisiones del XV Congreso”, aseguraban que la Oposición consideraba al Termidor como un “hecho consumado” y se embarcaba en el camino de un “segundo partido”. Aseguraban al pasar que Contre le Courant era un grupo “muy derechista y exclusivamente intelectual”. Precisaban: “En lo que concierne a la plataforma debemos decir que ya no podemos tomar la defensa de este documento que data de la época de la mayor violencia de la lucha fraccional, independientemente de la manera en que sean tratadas las distintas cuestiones. Va de suyo que, en nuestro trabajo, nos dejaremos guiar por las decisiones del XV Congreso”. (Pravda, 20 de enero de 1928). (Nota de la versión francesa).

[10] Se trata de la derrota de la revolución alemana de octubre. (Nota de la versión francesa). Para ampliar sobre este tema, ver los artículos de León Trotsky “Reporte al Tercer Congreso provincial de Moscú del sindicato de metalúrgicos”, “Ante la derrota alemana” y “Los problemas de la guerra civil”, publicados en este mismo boletín.

[11] Trotsky alude al gran movimiento de huelga de los mineros y a la huelga general en solidaridad con ellos. (Nota de la versión francesa).

[12] En un discurso pronunciado en julio de 1924 y reproducido en el folleto Europa y América, Trotsky por primera vez había demostrado la importancia del “imperialismo pacífico” de Estados Unidos, primera potencia mundial y su alianza con la socialdemocracia, lo que había revigorizado e internacionalizado a esta última ligándola a las perspectivas de reformas, de paz y de créditos. (Nota de la versión francesa).

[13] El V Congreso de la Internacional Comunista tuvo lugar en Moscú entre el 17 de junio y el 8 de julio de 1924. Las principales discusiones que lo recorrieron fueron la derrota de la revolución alemana, la llegada al poder del gobierno laborista británico y las cuestiones del partido ruso.

[14] Arkadi Maslow (1891-1941), fue uno de los líderes centrales del Partido Comunista Alemán hasta 1924. Dirigente de la Internacional Comunista, apoyó a la Oposición Unificada, y fue expulsado en 1926. Se unió a la Oposición de Izquierda Internacional en 1933. Ruth Fischer (1895-1961), junto con Hugo Urbahns (1890-1946) dirigente del PC Alemán en la década de 1920, fueron expulsados por los stalinistas en 1927 porque, como seguidores de Zinoviev, habían defendido a la Oposición Unificada rusa. En 1928 ayudaron a fundar la Leninbund, que colaboró con la Oposición de Izquierda hasta 1930. Ese año su dirección pasó exclusivamente a las manos de Urbahns, que expulsó a los oposicionistas de izquierda.